Quiero contarles un poco de lo que implica la toma de conciencia de la defensa planetaria para los humanos.
Nos ha llevado por diferentes caminos; verlo como un proceso integral posiblemente requiera de un tercero, hablando desde su experiencia, y ese es el papel de la protagonista de esta historia, cuyo nombre es Taige.
La humanidad se transforma; nuestro mundo, en muchos sentidos, es el mismo. Necesitamos una nueva forma de ver lo que sucede a nuestro alrededor; alguien llegará para recordarnos de qué forma modificar lo que somos y hemos hecho, crecer unidos por un destino esperanzador; puede ser posible, o no.
La protagonista central de este trabajo es una mujer del mundo que llegó a su final llamado EGGYA; todos sus pobladores necesitan con desesperación encontrar un nuevo lugar para compartir sus conocimientos, encontrar un planeta ubicado en la distancia perfecta desde un sol. No será fácil y los está destruyendo una compleja enfermedad.
Si este libro hubiera sido dictado por alguna entidad cósmica, el reflejo de su luz en la distancia y su espejo como galaxia de cristal en la nuestra nos permite entender algo importante.
Este trabajo, que disfruté ampliamente, no se hubiera realizado sin la colaboración de muchísimas personas que, en mayor o menor medida, alimentaron mi imaginación.
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