Los calendarios perpetuos son herramientas que permiten calcular el día de la semana para cualquier fecha futura o pasada, pero su “veracidad” depende del sistema que emulan y sus límites matemáticos.

Un «calendario de bolsillo» de 50 años que se ajusta girando la esfera para colocar el nombre del mes debajo del año en curso. Así se puede deducir el día de la semana o la fecha.
Un calendario perpetuo es un sistema diseñado para determinar el día de la semana de cualquier fecha, sin importar el año. Existen dos grandes tipos:
- Tablas perpetuas: Usadas en papel o software, combinan matrices de años, meses y días para deducir el día exacto.
- Relojes con calendario perpetuo: Mecanismos de alta relojería que ajustan automáticamente la fecha, incluyendo años bisiestos.
- ¿Son verdaderamente “perpetuos”?
- No del todo. Aunque el nombre sugiere que funcionan para siempre, tienen limitaciones:
- Calendarios tabulares: Son precisos dentro del marco del calendario gregoriano o juliano, pero no contemplan cambios futuros en sistemas calendáricos ni fechas móviles como la Pascua.
- Relojes perpetuos: Su precisión depende del diseño. Muchos fallan en años como 2100, 2200 o 2300, que no son bisiestos aunque sean divisibles por 4, debido a reglas del calendario gregoriano.
En este trabajo, el autor Sergey Morozov hace un análisis de este tipo de calendarios, por medio del cual ha logrado combinar cálculos para la creación del calendario Asgardiano.
El autor utilizó la invención propuesta para crear tres calendarios específicos: 1) el calendario espacial para el estado espacial de Asgardia (con fecha de referencia de 2016, fecha de la creación del estado de Asgardia); 2) el calendario espacial cristiano de la ONU con la fecha de referencia tradicional de la Navidad de Cristo; y 3) el calendario espacial universal lunar-solar unificado, el calendario galáctico del Universo.
Por primera vez, este calendario tiene un error promedio cero en relación con la duración del año solar tropical astronómico de Kepler y está diseñado para apoyar las actividades espaciales de la civilización en la era de la colonización del universo. La idea del calendario matemático eterno pertenece al patriarca judío Hillel II Jr., quien creó el calendario lunisolar judío eterno en el año 359 d. C. Este calendario aún es válido en el Estado de Israel.
Este calendario judío medieval presenta un desfase con respecto al estándar astronómico de referencia del año solar tropical astronómico de Kepler, cuya magnitud lo hace inadecuado para su uso en la era de la colonización espacial del universo a velocidades superiores a la primera velocidad cósmica. Por primera vez, la versión propuesta por el autor del calendario tropical matemático perpetuo no presenta ningún error con respecto a la duración promedio del año solar tropical astronómico de Kepler.
